domingo, 29 de mayo de 2011

gramma*


Estamos llenos de este gris plata,
ese haluro de que nos hace parecer
más negros, como oscuros recovecos
de esa memoria que llamamos táctil.

Esa pequeña luz que nos desnuda la intimidad
que llamamos nuestra
y que nos permitimos 
para que el otro- que creemos justo- ya no sea.

Somos objetos crueles que nos aprovechamos
del tiempo/
del espacio
hacemos juguetones negativos premensuales.

Nos queda la luz, la sombra
el augurio, el arquetipo
que llamamos sepia
sin percibirnos como lo que somos luego.

Perdemos peso
tamaño y forma
somos un solo recuerdo
del dibujo en ese pérfido papel.



*que significa 'escrito' o 'gráfico':        

jueves, 26 de mayo de 2011


TRILCE
(César Vallejo)

Quién hace tanta bulla y ni deja
Testar las islas que van quedando.

      Un poco más de consideración
en cuanto será tarde, temprano,
y se aquilatará mejor
el guano, la simple calabrina tesórea
que brinda sin querer,
en el insular corazón,
salobre alcatraz, a cada hialóidea
                    grupada.

      Un poco más de consideración,
y el mantillo líquido, seis de la tarde
      DE LOS MÁS SOBERBIOS BEMOLES.

Y la península párase
por la espalda, abozaleada, impertérrita
en la línea mortal del equilibrio.

Sed Solecito

Esa noche me levante como con sed, fui al baño de la habitación contigua, pero el espejo me dio un reflejo que no esperaba; apague la luz y mi rumbo cambió.

Desperté al bombillo de la cocina, buscando algo de beber, ya les conté que tenía sed. Busque leche, jugo, limonada, alguna jugosa fruta, y hasta agua, pero nada se dejaba encontrar por mi.

Regrese a mi habitación: uno dos tres cuatro ocho diez y seis pasos hasta mi cama. Me rasque el guargüero, me abrigue hasta el pecho, dejando claramente los brazos descubiertos (me fastidia taparme hasta mas arriba) pero seguí cavilando como calmar mi sed; estando en esas recuerdo ciertamente que me quede dormido. Me soñé con tu liquido cuerpo, con tus ojos como gris cafés rio, delinié con mis manos esas insospechadas mejillas de cascadas, y fue allí donde nada se escondió de mi, y fue allí mismo, en mi cama, que contigo mas allá de donde estabas, calmaste mi sed de ti.

I'm Leave

La muerte es mi consejera, ella es mi mano zurda, aviesa, corrompida...
Me cuenta cuentos de dragones de Austria, me canta viejos cantos de vikingos pelinegros de barbas profusas, me indica caminos de burbujas de jabón, me lleva a exposiciones de espaguetti en salsa de verduras y me da alternativas incongruentes y pesadas.

Me desnudo frente al rio y fornico con la muerte, me doy cuenta de la confusión por las abejas que le pican el dulce culo a la muerte que no avanza mas allá de mi izquierda. Me doy la vuelta y hago formaciones salosas con las sombras que producen las grutas de las nubes en las montañas. Un obtuso sueño se echa sobre mi, yo cedo, juego con él, pierdo.

Mi credo no me permite creer. Me olvido del olvido, poso mi mirada sobre el cabo de la vela que está viendo un perro muerto. Mi consejera se burla de mi faticidad, se me erizan los pelos del brazo derecho, y por ahi derecho me acuerdo de mi desnudez; me visto con los recuerdos de antes de los tres años, con los golpes jugando golosa.

Desexisto en el tiempo, me entrevero con los retoños de guayaba y guanabana. ¿Cómo hago para desaparecer desde mi existencia el dolor y los recuerdos del suelo que piso?

Poema

Oh Dios
Tú que no existes
eres afortunado
de no tener que cuidar
todo el género humano
En cambio yo
muero cada día
Con el dolor del loco
que destruyen los otros
Con el mendigo muero
Con el enamorado sufro
Sufro
Con la mujer confinada
en un bar musical
Lloro
y vuelvo a estar solo
a comer el agrio pan del exilio
entre tanta gente
que a veces amo.

Estados in-H-alterados2 de in-con-ciencias

"O que era verano, y a mi 
lado se daba un seto de gladiolos
florecidos; con ellos era que hacia
juego con mi camisa..."
Angelitos Empantanados.

Aguanto la respiración
y
me ahogo en las cobijas
de esta selva
tan espesa
de semen lunar
y
virginal calor eneristo.

Presiento llagas
en el calor húmedo
de tu cuello
y en la caricia que no llega/s.

Topo augurios grisverdosos
en los crespos de tus recovecos,
me aúno al llanto de la luciernaga y
el lobo bobo.

Grafito plomizo se muestra el a m a n e c e r.
Surco con buitres los gorjeos del agua.
Maizales blandos y enfermizos se d e l e i t a n.
Nado entre juncales repletos de barro.
/Atlextican.
/Juaracho.
/Meodítico.

Desgarro los músculos de mis dedos
tratando de huir de las 
músicas místicas muertas.

Escaneo los laberintos circundantes frente a estas
preposiciones/proposiciones (¿?)
Devaneo desde este aguacero de letras y síncopas
proporcionales originales.

Lobo/Agua-agua/Ceniza-Pucheros/comida.
Me insunflo fallas ortográficas y faltas técnicas.

Escóndete del leprosario tan frecuente de 
estos días.

Extiendo mi brazo, me inyecto H (cualquiertipodedenominación).
s s ll .

Lírico.

Encrucijada (Sálvate)

Vamos juntos al verde aquelarre de las brujas,
deja que el calor que trae su conjuro nos caliente.
Ahora siente como el caminar sereno de las buenas
señoras oscuras no se detiene frente a nuestro saliente protector.

Encrucijada (Repudiarme)

Déjame que te lleve junto a mi
a los terrenos patinosos del maní,
siéntate junto al terrón de azucar
y velo derretirse con el despejado jugar
del gato perezoso.

Encrucijada (Desbanalizarlo)

Pasa un carro blanco nacarado,
un gato mira despistado
desde la ventana del internado
al libre pajarito,
al leve pajarito,
la azulrayapintoso del bello pajarito.
El agua corre con su mierda
bajo nuestro pies desprovistos de verdad.

Encrucijada (Invitación)

Rueda conmigo sobre/bajo las montañas de esta sábana,
tapanos con las bolutas de humo que deja la señora Ana,
siente con mi tercera persona el jadear de su (el de ella, osea el tuyo) corazon/es.
Has la errónica tarea de contar las Equis en mi lista.
(O en) mis tenis.

Encrucijada (Geometrización)

Circulares cuadrados se encajan,
los huesos se desencajan.

Tu derecha-occidente.
Tu diafana izquierda-oriente.
Tu entrañable y oblicua cabeza-norte.
Mi zapato corazón inefable-sur.
Tu Sur.

Regalitos/Alegatos

Atizo el fuego hasta
Las blancas cenizas del alba.
Ahora te regalo
Los blancos caballos azules.
Embombino mis zapatos
Y me atavío de cerezos.
Te regalo el frío del cuchillo
Empuñado por mi mano siniestra.
Pequeños placeres me deleitan,
Alborozos lúcidos te engalanan.
Un gatico de Sol hace dulce festín
Con las estrellas fugaces. Se bebe el lácteo camino.
Encuentro cactus en mis sueños,
Las señas que me brinda el cielo son obtusas.
Cajita triste de los recuerdos,
Déjate, aliméntame, déjame.
La duración de un regalo de la tarde
Se guarda en los talones de la noche.
Sopor alucinante del tren,
Poesía triste y sin rimas me arrolla cerca al arroyo.
Me enjabono el pipí, los sobacos y encima de los talones, los crespos no para no dañar el peinado.
Me Arrastra el pensar los regalos del zapato.
Puertas vestidos ventanas
Esperas recuerdos ¿me amas?
Pequeño receptáculo con adminiculo de corbatín rosado
Para darte el sonido de la mezcla de azúcar y polvo de leche.
Noches oscuras para alumbrarte con mi leve sonrisa,
Mirarte y darte sombre en días de picoso Astro Mayor.

Los viajes del viento

Now here goes the Sunny Land
Sonny Boy Williamson

Valientes y felices
Estuvimos siendo humilladas
Por grandes idiotas indecibles.

Permanecimos calladas
Aumentando nuestras sombras
Haciendo de irrompible vacío

Nuestras almas.

Infinitos caminos nos dimos a recorrer,
Comimos naranjas agrias
Para saciar nuestra sed de morder,

Y  no nos dejamos corroer
por el salitre que dejaban/vejaban las bahías.
Desnudas dormimos al atardecer.

Los callos acusaron a nuestros pies
De factibles.
Las calles se cruzaron en nuestra bizarra mies.

No hubo cosa alguna que no quiso nuestro desaliento,
Y los vientos que llegaron a nuestros cuerpos
Se hizo, sin razón, se hizo mas violento

Dejándonos entristecidas y en harapos,
Bamboleándonos en nuestra débil borrachera
De caña sin azúcar /de sexo sin placer.
Quisimos saber que hacer
Pero huimos de ese verde perecer,
Siguiendo la azur brújula estelar.

Caminos sedientos
Se dieron y cedieron
(A)   / (Y) nuestra búsqueda ejemplar,

Para que antes de nuestro perecer
Viéramos las flores que nos sucedieron
Para al fin la vida dar a conocer.

Cancion

Al alma hay
Que darle de comer;
Un poco de gis
Y de vez en cuando un gran caramelo.

Hay que alimentarla todo el día,
Un poco de caricias, llenarla de galguerías.
No preguntarle a dónde iba
Fue
Irá
Sólo complacerla y darle gelatina.

Cantarle las canciones preferidas,
Llevarla de paseo en bicicleta
O por las ramas de una bella ceiba.
Arrullarla con las plumas
De un buen cantautor
O los visos de un rojo arrebol.

Decirle mentiras,
Que todo está bien/
Leerle poesías
De un firme amor o de verdes veranos.
Decirle verdades,
No todo está bien/
Que los periódicos mienten
Que no hay amor eterno – hablarle de invierno.

Reloj Al revés.

martes, 24 de mayo de 2011

Ad Hoc V

Me empujo.
Me obligo.

Otrora mi ombligo  se hubiera reído.

Monte Sinaí, Plaza del Jardín, Campos Elíseos,
Coca, amapola, marihuana, San Agustín, Peyote,
Tinto, aguapanela, Mate, Cocacola,

De lunes a domingo.

Me reviso los bolsillos.
Es fructífera esta requisa: tiempo doblado
                                          a pedacitos.

Pequeñas pesquisas: Cuarto de hora
                                   Cuarto de habitar
                                   Cuarto de centavo
                                   Cuarto de libra.

Poco soportables martillos de pianos
golpean mi cabeza,
tres goticas de lluvia me miran
desde el tejado vecino,
esperando mi aprobación para su suicidio:
L  o    A  p  r  u  e  b  o.

Y me deleito pensando que caerán en
el escote de una niña con miel en la  
                                                          mirada.

Los caminos son confusos esta tarde.
De arco iris.

Ad Hoc IV

Pinto pequeñas manchas sobre esta mesa.

He encontrado saludos de otros tiempos
     en viejos baúles de letras (Libros),

Recetas indecibles sobre un limpio y
    buen sexo (Cartas),

Fragmentos de humo sin fumar, fuegos
   sin encender (aspiraciones a ultranza),

Textos que no hablaban, no lo hacen,
    ni lo harán, solo cubiertos de insulsos
conectores (...),

Mi memoria Olfativa me recuerda el polvo
    del encierro de las decisiones,

Vuelvo, indeciso. Vuelvo incofortable. Vuelvo,
   vuelvo sin volver. Sufrible. 

Tengo un viejo mate que me mira,  
                                                       un bombilla
sin calentar, me falta la yerba. No fumo.

Recorro paso a paso el techo de mi habitación,
descubro ideas pegadas a el.

Reanudo las manchas sobre esta mesa,
  ahora con garbo de Sol.

Ad Hoc III

¿ Cuántos mundos posibles hay para cada sujeto?
¿El tiempo, el tiempo, el tiempo,
 será, pues,
                   influenciable?

Un jaguar es diferente a una estrella
un resultado se parece bastante a un
     quieto golpe en la puerta
     del Sol Vespertino.

Y sigo sin saber muy bien
   en dónde
   acomodar(-te)
   esta incapacidad creadora
y
  el tiempo de los aztecas.

Ad Hoc II

Pero es aquí, en este presente inmutable,
en este tiempo que solo pertenece a lo creado
que la cuestión se vuelve insufrible:

        Me muero en la piel cosmogónica
          de esta
                    azul
        serpiente celeste,

me lacero desde las costillas hasta al/el amanecer

viendo
este
riodepapeles escritos,                                         que   se   van,
                                                   huyen,
                                              se esparcen,
                                       al contacto de mis ojos.

Ad Hoc

Ya recuerdo 
cómo eras 
la última vez 
que te ví.

Tenías puesto
un sol en tus ojos
un mar en tu espalda
en tus senos el peso
de mil amores.

Ya recuerdo cómo eras
el invierno pasado,
te estremecias como el
mar con sus olas, 
al escuchar,
como quien quiere caer en
delirio frenesí absoluto.