sábado, 17 de marzo de 2012

Bolero de los esperados

A Manuoche, espinita de mis carnes.


Canto a esa mujer
que ya no advierto

A la que aguardo en la curva del camino
de un
pueblo

A la inagotable silla
que me sujeta a tierra

A esa mujer
/oteo y sopecho/
a esa mujer

Yo le amaré

querrá la letra escogida sobre las demás
querrán los astros y laberintos su ocultísimo lunar

vendrán de visita pequeñísimas lluvias
/en cierta porción de mar/
canto

Existirá el desierto -- suyo.

Din darán dararán.

A la fosforescencia que me llena
las calles de arena
-canto-
que el viento aletea
como una flor clandestina

Suyo el caique
mío
el puerto.

Su ocultísimo lunar querrá el pentagrama y la metáfora.

martes, 13 de marzo de 2012

8vo. pétalo de flor.

La razón es clara.   J. L. Borges
¿Y el corazón?  Yo.
Húmedo pensamiento
recuerdo desnudo,
tierra que brota despacio
y me aleja de ti-

coge tu azada. Llega hasta a mí.

Quítame esta sombra seca
hazme húmedo como tu mirada
o toronja vieja de dolor.

Haz tu casamiento
vive en mi nido
yo no soy reacio
duerme cerca a mí-

hago los zurcos. Siembro por ti.

Dime pájaro que vuela
que la noche sea luna
y arcoiris de tu boca
y así solea en mi  vida.

No dejes que muera el amanecer.

Dulce inquietud

De los suspiros algo nace que no es la pena
Dylan Thomas
Es un laberinto oscuro
el que surca mis manos, 
como callejuelas obtusas
o
árbol de ciudad.

Camino entrecortado por
la luz
y el edificio que oculta
el sol
nocturno con cerveza.

Cantan pájaros azules
en días amarillos
con horas floripondias
que no corresponden  muy bien

al paraíso perdido 
ni a la bibliothèque.

Se alzan enhiestas/
como mares/
iglesias mentirosas
que corrompen como los días al muerto.

Y mis manos aun no dilucidan
el aúreo ovillo.
No soy gato pra seguir 
mi olfato.

Tip de Medialuna

Tú eliges el lugar de la herida en donde hablamos nuestro silencio" A. Pizarnik 

Ese silencio guardado, inicuo/
que perdura en la constante compañía
viene agotando mis instantes y mis días.

Todo trabajo arduo y pesaroso
hinca a un lado del camino
la piedra que es tropiezo y espanto
al latir repetitivo de mi diástole.

Y de que sirve, la palabra,
si acaso, el raspón de la conciencia
aun no cicatriza.

Requiero un cambio de cabeza
o
de un requiem.
No quiero pluma ni viento
si esta vela del barco nuestro
no tiene clara la fihista

o siquiera el siguiente punto cardinal.

(Toma la desición.
                              Y la palabra).

sábado, 3 de marzo de 2012

Conjuro

    Los habitantes de mi aldea 
    dicen que soy un hombre 
    despreciable y peligroso 
      Y no andan muy equivocados
      Despreciable y Peligroso 
      Eso ha hecho de mí 
      la poesía y el amor 
      Señores habitantes 
      Tranquilos que sólo a mí suelo hacer daño 

    Pequeña elegía

    Ya para qué seguir siendo árbol
    si el verano de los años
    me arrancó las hojas y las flores
    Ya para qué seguir siendo árbol
    si el viento no canta en mi follaje
    si mis pájaros migraron a otros lugares
    Ya para qué seguir siendo árbol
    sin habitantes
    a no ser esos ahorcados que penden
    de mis ramas
    como frutas podridas en otoño.

    El suicida

    Airoso en su galope
    levantó la mano armada
    hasta su sien
    y disparó:
    suave derrumbe
    del caballo al suelo
    Doblado sobre un muslo
    cayó
    y sin un solo gemido
    se fue a galopar
    a las praderas del cielo.

    La soledad

    No sé dónde arderás ahora corazón mío
    Necesito entregarte siempre como esclavo Pobre de ti
    Es urgente que enfermes otra vez y otra vez
    Qué voy a hacer contigo ahí desocupado
    como estúpida biología Vamos deshazte
    de tu pesadumbre y emprende vuelo
    ¿Qué te sugiere el momento? ¿Te gusta esa mirada
      envejecida pero atenta de tu buena sobrina?
    Ve y háblale de cuando lloró sin motivo
    O cuando de la risa se orinó en los calzones
    O mejor recorre un campo y siembra un árbol suntuario
    O llévate cordel y una navaja
    y construye un barrilete y eleva con él tu soledad hasta las nubes
    No No queremos los dos amigo mío hacer nada de eso
    Queremos acostarnos otra vez sobre su vientre
    Pero esos tiempos han pasado Su cuerpo y su deseo
    deambulan entre cines y bares de la urbe
    enfebrecidos detrás de otros cuerpos y otros deseos
    Y eso está bien Es su vida sin nosotros
    Tiene derecho también a un placer libre
    Allí está sola la luna y no se muere Solo está el viento
    Tú me tienes a mí
    Y a Nuestra Señora La Soledad de Gómez Jattin

    Naturaleza nocturna II

    Pudiera-se traer una sonrisa, como el llanto-
    Las lluvias traídas por los ojos.
    Las nubes en la boca.
    Los mares en el sexo.
    Centauros en la dicha.
    La incógnita en el ojo que despierta.
    La repetida palabra de la desazón.
    El augurio hilado en el tejido de los días.
    La rueca de Penélope en las manos que aseguran.
    Maderas volátiles en la histórica promesa sioux.
    El agitado corazón... boca con sed.
    Palabras pasadas que se dirán mañana.
    El suspiro que dejó inconclusa la voz, el habla.

    Un sueño que dormirá como flor blanca en la bata de Sei Shonagon 
    y su primavera en el alba.

    Naturaleza nocturna

    Soñará el mismo sueño y no sospechará que otros lo soñaron.
    Borges
    Es el sueño una flor rosa
    que flota entre la Noche,
    deshabitada de matorrales
    que la ensucien.

    Las baldosas de ángulos rectos
    le protegen de caer
    y romperse en incontables
    pedazos que harán despertar

    al desprevenido que le llegue este.

    Muévose entre deliciosos elíxires
    que le brindan caminos
    o exasperadas inquisiciones ,
    el sueño, que otorga nuevos suspensos.

    Es el sueño 
    una puerta entreabierta
    que lleva a otro lado
    pero no deja atadura alguna para regresar a él.

    Un herraje o un árbol
    puede ser el sueño,
    desmembrado o completo
    nos deja la inquietud de la vigilia.

    A color o a blanco y negro
    sepia o psicodelia
    nos roba alguna parte del descanso,
    desasosiega el reposo que él mismo nos ofrece.

    ¿Pudiera, acaso,
    traer algo tangible
    alguien
    que ha estado en los terrenos del sueño?

    Del sabor y la/tu forma

    Quiero cortarle las venas
    a la noche
    para que salga el sol
    y evitar este espeso desasosiego
    que me deja tu partida

    Haré crema con esta noche
    cuajada de estrellas
    y la la comeré con el recuerdo
    de tu perilunea desnudez.

    Dejaré que los cielos planetarios
    se asomen en su estela
    y los seguiré uno a uno
    como a los lunares de tu corpórea faz.

    Ahuyentaré los satélites que rodean 
    esta agua flotente del espacio
    para que atracen el tic-tac
    de la memoria.

    Adoro, como a un dios pagano,
    ese croquis geográfico
    que dejas con tu cuerpo
    sobre la orografía de mi cama.

    Me he quedado ciego 
    a tu belleza.
    Tu cuerpo se ha vuelto
    mi braille.

    Desierto (2)

    Cactus coloridos múltipless
    flores rocosas y dulces,
    amalgamado cielo azul y cerúleo
    hacen de este desierto

    el mío.

    Desierto cubre mis carnes callosas,
    ahogadas y asmáticas.
    Desprendo un humos horrendo,
    no plácido ni para losgusanos de la muerte

    Areniscas se hacen remolinos en mi pecho,
    se hunden en mis ojos, me irritan hasta
    el tuétano.

    El agua escasea en este desierto
               -el mío-
    busco desesperado y sediento, un oasis
    en el cuerpo de los dioses tutelares, o seo

    el tuyo.